A lo largo de mi carrera me he encargado de llevar un mensaje muy claro sobre la importancia de proteger nuestro patrimonio más invaluable NUESTROS HIJOS, NUESTRA FAMILIA y NUESTRAS EMPRESAS. He asesorado a muchísimas personas a lo largo y ancho de América Latina y el Caribe, muchas de ellas han tomado la trascendental decisión de BLINDAR su PATRIMONIO.

Pero todo en la vida no es color de rosas, muchos también se negaron a esa oportunidad, por más que insistí muchísimas veces en que cambiaran de idea (y no con el fin de tener otra venta o incrementar mis ganancias) sino, de hacerles entender que ese momento era LA OPORTUNIDAD DE SU VIDA porque había SALUD y su capacidad económica les permitía dar ese paso tan importante.

¿Y saben qué? volvió a aparecer la palabra “NO”.

Hoy día algunos me han buscado nuevamente, pero, lamentablemente no pude ayudarlos porque la enfermedad ya estaba presente.

Para otros fue muy tarde, se marcharon de este mundo y ya el resto se lo pueden imaginar… para los que no logran imaginárselo se lo resumo en dos palabras BANCARROTA FAMILIAR.

LA VIDA es un ratico, no ignoremos las OPORTUNIDADES que nos da.